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Sección Panzer IV

Informe redactado a comienzos de Abríl de 1942 por el Leutnant Schauwecker, jefe de la 2./Pz.Rgt. 203, donde se recopilan las primeras experiencias realizadas por esta unidad con sus nuevos Panzer IV con el cañón de 7,5 cm KwK 40 L/43.

Notas:
La 'Kompanie Wallroth' (curiosamente denominada con un nombre diferente al del apellido de su jefe) fué una de las primeras unidades acorazadas a la que le fueron asignados los primerísimos Panzer IV Ausf. F2 equipados con el nuevo cañón largo de 7,5 cm.

O.U., 09.4.1942

Kompanie Wallroth

00 164 D

Experiencias provisionales con el Pz.Kpfw. IV con cañón largo

1. Compartimento de combate
   
   
   1. Almacenamiento de munición
      
      
      1. El contenedor para almacenar granadas entre el asiento del conductor y el compartimento de combate debe ser eliminado pues este impide que en casos de peligro el conductor pueda abandonar rapidamente el vehículo. Abandonar el vehículo a través de la escotilla delantera no es posible dependiendo de la posición de la torreta. Además este contenedor impide la extracción de granadas de la caja situada bajo él.
      
      
      2. El contenedor para almacenar dos granadas situado detrás del asiento del artillero no puede ser usado pues la extracción de estas granadas solamente es posible tras media hora de trabajo empleando un martillo y una palanca. El extraer las granadas desde el interior del compartimento de combate no es posible: para lograrlo deben abrirse las escotillas y el comandante y el artillero deben abandonar sus posiciones.
      
      
      3. El diseño del contenedor de munición con capacidad para nueve granadas situado a la izquierda del asiento del artillero conduce a que cuando las tres granadas superiores y las tres granadas medias han sido extraidas las tres restantes granadas caigan por sí solas. Remedio: las planchas intermedias no pueden ser montadas con tanta holgura, deben estar tan fuertemente fijadas que las granadas inferiores no sean solamente retenidas por el peso de las granadas superiores sinó tambien cuando la presión provocada por estas desaparece.
      
      
      4. Debido a la gruesa capa de pintura todos los contenedores y soportes de munición son demasiado ajustados, razón por la que la extracción de munición solamente puede realizarse empleando mucha fuerza y con el apoyo de herramientas. Estas experiencias se han realizado en todos los carros de combate.
   2. Voltímetro del motor DKW
      
      Al recibir los carros de combate los voltímetros para el motor DKW situados a la izquierda del asiento del artillero en dos vehículos se encontraban ya dañados, en el resto de los carros de combate estos voltímetros fueron rapidamente averiados por el artillero al introducirse y/ó abandonar este el vehículo. Remedio: este voltímetro se encuentra aproximadamente ahí donde el artillero coloca su pié izquierdo; si el voltímetro no es protegido mediante una chapa de protección su destrucción es inevitable.
   
   
   3. Ametralladora del radiotelegrafista
      
      La placa de fijación del arma se afloja al disparar, la ametralladora se suelta y la guía de corredera es arrancada. Remedio: fijación de la placa de fijación del arma.
   
   
   4. Optica
      
      En dos carros de combate se ha observado que tras los primeros disparos la óptica del cañón se afloja y posteriormente no es posible apuntar con precisión. Esto ha podido constatarse tras haber desmontado la óptica en la armería: debido a restos de aceite y suciedad la óptica no había sido atornillada completamente y posteriormente había sido cubierta con pintura. Tras los primeros disparos los restos de suciedad y aceite desaparecen y la cubierta de pintura revienta, la óptica se afloja. Una vez realizada la limpieza por la armería la óptica tuvo que ser atornillada en más de media vuelta antes de que ésta se encontrara fija.
   
   
   5. Cañón
      
      El largo tubo del cañón obliga a conducir con mucha precaución e impide - especialmente en terreno boscoso - el girar la torreta a izquierda ó derecha. Aún y así durante los combates se ha constatado en un carro de combate lo siguiente:
      
      Una granada impactó en la cercanía del carro de combate y partió en dos un árbol de tamaño medio que cayó sobre el tubo del cañón y que dañó el sistema de giro de tal forma que la torreta no podía girarse, causando así la baja temporal del vehículo. En la armería se pudo constatar que el eje del sistema de giro se había doblado totalmente y que el engranaje inferior había reventado. Remedio: Incorporación de un embrague de fricción que actúe cuando se ejerce una gran presión lateral sobre el tubo del cañón y que haga girar entonces la torreta, impidiendo así la avería del sistema de giro.
   
   
   6. Sistema de fijación del cañón
      
      El sistema de fijación del cañón unicamente puede ser actuado con grandes dificultades y despues de largos intentos. El sistema empleado en el Pz.Kpfw. IV con cañón corto es más práctico.
   
   
   7. Desarrollo de humo
      
      El desarrollo de humo en el compartimento de combate, especialmente cuando se usan granadas perforadoras, es muy intenso e impide durante un tiempo la visión y cualquier tipo de corrección de tiro tras el primer disparo. Remedio: en el caso de que este gran desarrollo de humo no pueda ser corregido por los productores de la munición debe de incorporarse un ventilador más grande, no en su actual posición sinó directamente sobre la recámara del cañón.
   
   
   8. Combustión de los residuos de polvora
      
      Tras cada disparo de granadas perforadoras ó de alto explosivo se forma una llamarada frente al comandante que, en combinación con el fuerte desarrollo de humo, dificulta su visión.


2. Cadenas
   
   
   1. En uno de los carros de combate de los que se informa y sin que este hubiera sido sobrecargado de forma especial las cadenas se rompieron por causa de defectos en el material en tres ocasiones.
   
   
   2. En dos carros de combate de los que se informa varios dientes de sus cadenas estaban rotos ó bien dañados ya al sernos estos entregados. Tras una corta marcha los dientes de las cadenas se doblaron, dañando las ruedas y acabaron rompiendose totalmente. Al no disponer las ruedas de ninguna guía las gomas se desplazaron y tras un corto periódo de tiempo las ruedas quedaron inservibles, teniendo estas que ser sustituidas.


3. Efectos del cañón
   
   La capacidad de perforación de la granada perforadora es extraordinária; así a una distancia de aproximadamente 1000 metros y bajo un ángulo de impacto muy desfavorable se logró reventar totalmente el casco de un T-26 y sin que la granada variáse su dirección tambien destrozar el interior del carro de combate.

Firmado: Schauwecker,
Leutnant y Jefe de la Compañía