Documento redactado por el Oberstleutnant Wilhelm Ritter von Thoma en Diciembre de 1936 donde se recogen las primeras experiencias del 'Gruppe Thoma' con sus Panzer I Ausf. A en combate contra los carros de combate rusos T-26 al servício de los republicanos y donde queda de manifiesto la enorme superioridad de los vehículos rusos.

Cubas, frente a Madrid, el 06.12.1936

Gruppe Thoma








Experiencias en el combate del carro alemán armado con ametralladoras y el carro ruso armado con cañón



El principio de que el carro de combate armado con cañón es de antemano superior al carro de combate armado con ametralladoras era ya conocido durante la guerra y tampoco en la posguerra ha sido puesto en entredicho.

En el transcurso de los primeros combates y gracias a la munición especial nuestros carros de combate armados con ametralladoras lograron frente a los carros rusos equilibrar esta desventaja, hasta que desde el lado rojo y provocado por las pérdidas de carros de combate con gran rapidez constataron que los proyectiles perforaban el blindaje de los carros de combate rusos hasta una distancia de 120 - 150 metros. A una distancia de 200 m y como se ha constatado aquí con pruebas el proyectíl ya no perfora el blindaje del carro de combate ruso. La defensa frente estos desagradables efectos era sencilla y fué aplicada de forma inmediata: los carros de combate rusos ya no se adelantaban tanto y cuando avistaban los carros de combate armados con ametralladoras mantenían casi siempre una distancia superior a 1 Km con ellos y de forma estática y con gran puntería les disparaban con sus buenos cañones. Sus posiciones de tiro se encontraban generalmente en patios donde gracias a su altura podían disparar a través de los muros para despues del disparo girar la torreta a la posición de 6 horas y así no poder ser tan facilmente descubiertos. Sobre terreno abierto siempre que ha sido posible se han posicionado en zonas bajas y han rastreado el terreno asomando unicamente la torreta. Tambien en estos casos han mantenido siempre una distancia de seguridad.

A estas distancias la munición especial ha sido inútil, el objetivo tambien es demasiado difícil y nuestros carros de combate no han podido en ningún caso quedarse parados, en aquellos casos donde lo han hecho el resultado ha sido un impacto de artillería. De este modo se han perdido varios carros de combate incluidas sus tripulaciones.

En estos casos tambien el cañón anticarro es inútil pues su óptica alcanza unicamente hasta los 900 metros y el disparar sin ella no ofrece ninguna puntería. El carro de combate ruso en cambio puede gracias a su óptica disparar hasta los 3000 metros.

Aquí forzosamente se combinan a una compañía de carros de combate cinco cañones anticarro para de este modo al menos disponer de alguna protección frente a los carros de combate rusos. Aún y así los efectos han sido insignificantes pues el conocimiento de estas nuevas armas, carros de combate y cañones anticarro en un principio ha sido peor que insuficiente y a pesar de la instrucción recibida los cañones anticarro siempre han comenzado a disparar contra los objetivos a distancias de más de 1000 metros.

De todo esto se deduce que despues de que los carros de combate rusos evitan el combate a cortas distancias, anulando así la munición especial y los cañones anticarro, la superioridad de los carros de combate armados con cañón frente a los armados con ametralladoras es muy superior.

Por estos motivos la reclamación de un carro de combate armado con cañón es urgente: en el caso de que no se haya ya diseñado un cañón para carro de combate debería intentarse incorporar el cañón de 2 cm KwK30 del vehículo acorazado callejero (Strassen-Panzerwagen). Otras soluciones provisionales podrían ser 1) el cañón de infantería 18 que puede emplearse hasta los 3000 metros, 2) Incorporar orugas al vehículo acorazado callejero pues su cañón de 2 cm, el KwK30, es capaz de combatir al menos a 900 metros al carro de combate ruso y 3) un visor de líneas y un visor telescópico para el cañón anticarro con un alcance de en lugar de 900 metros al menos 1500 metros, aún y así a esta distancia la capacidad de penetración será insuficiente.




Firmado: Thoma




Texto añadido adicionalmente a mano y parcialmente ilegible:

Tiene que constatarse que actualmente nuestra formación de carros de combate es contra carros de combate equipados con armas de gran calibre totalmente inferior y por este motivo generalmente solamente puede operar ahí donde no se esperan carros de combate equipados con armamento de gran calibre. Esto supone naturalmente una gran limitación de uso.