Informe del Jefe del Estado Mayor de la 20. Gebirgs-Armee, Generalmajor Ferdinand Jodl (hermano del Generaloberst Alfred Jodl), donde se informa sobre los resultados de pruebas realizadas con granadas de humo lanzadas contra el carro de combate T-34.

Nota:
El nocivo efecto de los gases desprendidos por las granadas de humo sobre la tripulación en el interior del carro de combate no debe ser menospreciado, como demuestra este documento.

09.10.1942

AOK 20. (Geb.)Armee

Abt.Ia/Ausb.Nr.3113/42 geh








La realización de pruebas sobre el empleo de medios de niebla como arma de proximidad en la defensa anticarro con un T-34 operativo han dado los siguientes resultados:



1. Prueba:

Carro de combate detenido, motor en marcha, escotillas cerradas. Lanzamiento de una granada de humo muy cerca del T-34.

Resultado:
Rápida y concentrada incursión de humo en el vehículo debido al efecto de succión del motor así como a la permeabilidad de la escotilla delantera, montaje de bola de la ametralladora delantera y ventilador de la torreta.

Efectos:
Debido a fuertes náuseas y sensación de asfixia la tripulación se vió obligada a abandonar rapidamente el carro de combate. Los efectos del humo son especialmente nocivos para el conductor y el servidor de la ametralladora delantera. El abrir la escotillla delantera es insuficiente para ventilar el interior del vehículo.


2. Prueba:

Iguales condiciones como en la prueba anterior pero en este caso con el motor apagado.

Resultado:
Como arriba, si bien en este caso la tripulación no se vió forzada a abandonar el carro de combate hasta pasados varios minutos.


3. Prueba:

Carro de combate en movimiento, escotillas cerradas. Lanzamiento de granadas de humo contra el carro de combate y que tras chocar contra él rebotaron y cayeron al suelo.

Resultado:
Leve perturbación de la capacidad de combate de la tripulación, no tanto por la incursión de humo en el interior sinó por limitación de su visión.


4. Prueba:

Carro de combate en movimiento, escotillas cerradas. Lanzamiento de dos granadas de humo unidas con un cable de 2 cm de largo (granadas gemelas) sobre el tubo del cañón (generalmente este tipo de lanzamiento se realiza con éxito tras haber sido entrenado)

Resultado:
La tripulación se vió obligada a abandonar el carro de combate tras medio minuto. Total incapacidad de observación.

Nota:
Si la tripulación es muy astuta el ponerse la máscara antigás y girar la torreta en 180° permite disminuir los efectos del humo de modo que el carro de combate puede huir y ponerse a salvo. En cualquier caso el carro de combate no puede continuar combatiendo.



Estas pruebas demuestran que la niebla artificial puede ser un importante medio para la defensa frente a carros de combate enemigos. Estas experiencias deben ser evaluadas para su empleo en la instrucción.




En nombre del AOK,
El Jefe del Estado Mayor
Firmado: Jodl